Sueño infantil: Etapas y consejos prácticos para la familia

17.05.2025

Dormir es mucho más que cerrar los ojos. Para los niños, es una necesidad biológica fundamental para crecer, desarrollarse y sentirse bien durante el día. Pero… ¿qué pasa cuando ese sueño no se parece en nada al de los adultos? ¿Cuándo empieza a cambiar? ¿Cómo podemos acompañarlos sin perder la calma?.

En este artículo que hoy les comparto, les voy a contar como evoluciona el sueño desde que nace un bebé hasta que logra dormir de forma más parecida a la nuestra, y te comparto algunos consejos prácticos para acompañar cada etapa sin perder la paciencia (ni tus horas de sueño).

Etapa 1: Recién nacido (0 a 3 meses)

¿Cómo duerme un recién nacido?

  • El sueño está fragmentado: duermen entre 14 y 17 horas al día, pero en bloques cortos de 2-4 horas.

  • No distinguen el día de la noche.

  • El sueño está guiado por el hambre (se despiertan para pedir alimento) y la necesidad de contacto (se despiertan para pedir "upa" o tener contacto con su cuidador o figura de apego)

Tips prácticos:

  • Luz y oscuridad: durante el día, mantené la casa con luz natural y sonidos normales (tono de voz habitual, musica bajita o lo que acostumbren en tu hogar). A la noche, usá luz tenue, hablá  bajito y evitá ruidos molestos. Esto va a ir generando un hábito.

  • Contacto y seguridad: los brazos NO MALCRIAN NI ACOSTUMBRAN. El porteo y el colecho seguro pueden ayudar a calmar y regular al bebé.

  • Sueño seguro: siempre acostado boca arriba, sus bracitos por fuera de las mantas, sin almohadas, sin peluches ni mantas sueltas. No fumar en ambientes compartidos con el bebé.

Etapa 2: Lactante menor (3 a 6 meses)

¿Qué cambia?

  • Empiezan a consolidar más el sueño nocturno, "tiran de corrido" algunas horitas más.

  • Aparecen ritmos más predecibles: van estableciendo su propio patrón de sueño, que sus cuidadores reconocen.

  • Siguen necesitando despertares para alimentarse.

Tips prácticos:

  • Rutina previa al sueño: un baño, una canción o una luz tenue cada noche ayuda a anticipar el descanso. De esta manera se va creando el hábito.

  • Acompañá con calma: no todos los despertares necesitan intervención inmediata. A veces, un suave "shhh" es suficiente. Reonocer si los despertares son por hambre o por mimos (apego).

  • No comparar: cada bebé tiene su ritmo, y eso está bien.

Etapa 3: Entre los 6 y 12 meses

Hay cambios importantes:

  • El sueño empieza a organizarse en fases similares a las de los adultos.

  • Algunos bebés pueden dormir bloques más largos por la noche.

  • Aparecen regresiones (especialmente cerca de los 8-9 meses): piden más pecho/alimento, quieren más contacto. Habrá dias y DIAS!

Tips prácticos:

  • Rutinas de forma constante: repetir la misma secuencia cada noche ayuda a dar seguridad.

  • Es normal que se sigan despertando por la noche, sobre todo si están atravesando cambios.

  • Presencia tranquila: si hay despertares, trata de mantener la calma y ofrecer consuelo sin estimular demasiado.

  • Objeto de apego (peluche, manta): puede comenzar a utilizarse a partir de los 6-8 meses.

Etapa 4: De 1 a 3 años

El sueño se parece más al de los adultos, pero...

  • Comienzan los miedos/terrores nocturnos: se despiertan de golpe, asustados o llorando sin saber referir muy bien que sucedió.

  • Puede aparecer la resistencia a dormir.

  • Las siestas disminuyen progresivamente.

Tips prácticos:

  • Rutina y límites amorosos: sostener horarios, mantener una rutina previa al descanso. El exceso de azucar sobretodo de noche puede producir una hiperactividad que dificulta el sueño.

  • Validar el miedo: si aparece el temor a la oscuridad, podés ofrecer una luz tenue antes de dormir, tu compañia hasta conciliar nuevamente el sueño y un objeto de apego. SIEMPRE explicar que lo que soñó o imaginó no existe en la realidad.

  • Evitar pantallas e hiper-estimulación antes de dormir: al menos 1 hora antes, ya que interfieren con la liberación de melatonina (horomona que nos ayuda a conciliar el sueño y se libera en respuesta a la oscuridad). Tené en cuenta que hasta los 2 años la recomendación es cero pantallas, y esto ya lo charlaremos en otro post de este blog.

¿Cuándo el sueño se parece al de un adulto?

Alrededor de los 3 a 5 años, muchos niños ya duermen toda la noche sin despertarse, con un sueño consolidado y reparador. Pero esto no es una regla matemática: cada niño/a tiene su propio camino, por eso es importante realizar los controles pediátricos de rutina y comentarle al pediatra si notamos alguna dificultad o "algo" nos llama la atención de modo que podamos evaluar si es una variante de la normalidad o hay que estudiar/tratar alguna causa.

Te muestro un gráfico con las horas APROXIMADAS de sueño según edad. Tené en cuenta que lo importante es que el tiempo que duerma el niño le permita poder realizar todas sus actividades del día sin estar agotado o cansado.

Consejos generales para todas las etapas

  • Confiar: el sueño infantil no es un problema, es un proceso.

  • Acompañar sin imponer: los cambios forzados suelen generar más ansiedad, por eso es importante conocer cada etapa y sus características.

  • Pedir ayuda si lo necesitás: cuando el cansancio abruma, contar con una red de apoyo es fundamental: familia, amigo/as, terapeutas y pediatras.

Acompañar el sueño de nuestros hijos es también una forma de cuidar su salud y su desarrollo, pero sobre todo, de estar presentes desde el amor.

Espero que te sirva esta información para poder acompañar a tus peques en todos sus procesos a lo largo de su vida. 

Dra. Romina Baquin - Médica Pediatra